lunes, 3 de noviembre de 2014

De perros

Un hueso roído por un perro manso. El mismo hueso, una y otra vez. Años mascando ese residuo duro e insípido que dices es mejor a no tener nada. La escasa algarabía de las horas muertas lamiéndote en el sofá las heridas. Así es la vida que se te escapa. 


Este texto ha sido publicado hoy en el blog 50 palabras


1 comentario:

  1. Es un texto muy triste. Para nada perruno, a mi entender. me gusta el poso que deja, en el sofá de las lecturas que llegan.

    Un abrazo y enhorabuena, Sara.

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